Hacia junio de 1888, las religiosas dominicas de la tercera orden docente, conocidas como las dominicas docentes, tuvieron una reunión comunitaria en la casa francesa de Toulouse convocada por la madre Hedwige Portalet, su fundadora. Portalet planteó que la congregación tuviera presencia en Latinoamérica, en una obra para cuidar a leprosos en Cuenca, Ecuador. De esa manera, cinco hermanas francesas se asentaron en Ecuador desde 1889, progresivamente desenvolviéndose también en labores educativas.

Fray Alberto Delgado, un sacerdote peruano que había transitado por Ecuador y había sido nombrado provincial de los dominicos en Perú, informó al cónsul de Francia en Trujillo sobre el destacado trabajo que realizaban las religiosas en los colegios de Ecuador. Inspirado por esta recomendación, el presidente interino de la junta departamental, Antonio Delfín, solicitó que las religiosas vinieran al Perú para encargarse del colegio de educandas.

El 8 de julio de 1895, durante un consejo extraordinario, se decidió enviar a un grupo de hermanas al Perú. Fueron asignadas Madre Henry Colot y Mari Fili Menticart, junto con cinco hermanas ecuatorianas: María Amada Ortega, María Teresa Crespo, María Cecilia de Ause, Angélica Crespo y Lucía Hato. Tres años después, un 28 de julio de 1898 llegaron a Trujillo la Reverenda Madre Provincial Sor Marie Dominique Fond y su secretaria para firmar el contrato con Delfín por 10 años.

Las dominicas docentes fundaron el Colegio Nacional Santa Rosa de Trujillo el 4 de julio de 1898 con el nivel secundaria. En 1902, las hermanas vieron la necesidad de educar también a niñas de primaria y fundaron en el local de secundaria el centro educativo Clase de los Ángeles, haciendo alusión a la inocencia de las pequeñas. Sin embargo, en 1973 y con la Resolución Directoral Regional el nivel primario se denominó Centro Educativo Particular Santa Rosa. Desde el año 2000 el colegio fue reconocido como Centro Educativo No Estatal Santa Rosa.

A partir del año 2022, la dirección del colegio dejó de estar en manos de las hermanas y pasó a ser asumida por laicas. Actualmente el colegio es una institución acreditada y continúa impartiendo los valores dominicos desde la pedagogía de Luz y Verdad a niñas y jóvenes trujillanas. 

Comunidad Santa Rosina. Sin fecha. Comunidad de ex alumnas en Facebook. 

Fuentes: